Jared Diamond: “Soy optimista de que los chilenos tendrán éxito en hacer una nueva transición”

El autor de "Colapso" y Premio Pulitzer por su bestseller "Armas, gérmenes y acero" sostiene que en momentos de crisis “los líderes que hablan de cambiarlo todo casi siempre son líderes tontos que cometen un gran error”. En esta entrevista con La Tercera, Jared Diamond se refiere, además, al proceso constituyente chileno y habla de "Crisis", su última obra.


¿Cómo los países pueden afrontar sus “horas más oscuras” y fortalecerse?, se pregunta Jared Diamond y su última obra, Crisis, un viaje hacia aquellas experiencias, rasgos y patrones que -a su juicio- pueden fortalecer o hundir a quienes atraviesan momentos duros. En este libro analiza la situación de siete naciones (Japón, Finlandia, Indonesia, Alemania, Australia, Estados Unidos, y también Chile y su retorno a la democracia) cuando enfrentaron grandes encrucijadas, y va revelando lecciones relevantes para ser compartidas, especialmente en un mundo incierto como el actual.

Destacado geógrafo, biólogo y fisiólogo evolucionista, Diamond es Doctor por la Universidad de Cambridge y profesor de geografía en la Universidad de California en Los Angeles. Recibió el premio Pulitzer en 1998 por su best seller Armas, gérmenes y acero. Es miembro de la Academia de Artes y Ciencias y de la Sociedad Filosófica de su país. Sus otros libros, como Colapso (2006) y El tercer chimpancé (1992), han sido grandes best sellers y traducidos a 38 idiomas. Otros de sus reconocimientos incluyen la Medalla Nacional de Ciencia y el Premio Tyler para Ciencia Medioambiental, además de la Beca Mac Arthur (en 1985), considerada una distinción para “genios”. Por qué las civilizaciones se desarrollan, rinden frutos y colapsan está en el centro de su interés.

“Jared Diamond ha vuelto a conseguirlo: otra narración sólida, original y fascinante sobre la historia de la humanidad”, dijo Steven Pinker sobre Crisis.

A sus 84 años -y desde California-, contesta vía email a La Tercera algunas preguntas acerca de su obra y su mirada sobre la crisis del Covid y la climática, y también sobre el proceso chileno, uno que conoce pues vivió aquí hace muchos años. Uno de los capítulos de Crisis, justamente, es acerca de cómo Chile sorteó con éxito la salida de la dictadura de Pinochet.

Jared Diamond

En su obra dice que una crisis es un “momento de la verdad” y, en ese sentido, puede ser muy positivo para avanzar. Sin embargo, estas provocan temor y resistencia. “¿Por qué la gente se resiste a afrontar una crisis? Hay un dicho: mejor el diablo que conoces que un diablo desconocido”, afirma.

En su libro dice que, tal como en una crisis personal, el primer paso para un país en crisis es reconocer que está viviendo una. Pero ¿cómo llegar a consenso sobre la profundidad de la crisis?

En cuanto a cómo llegar a un consenso en la profundidad de una crisis, en una nación compuesta por millones de ciudadanos, por supuesto es imposible obtener la unanimidad. Pero a menudo es posible obtener un acuerdo del 55%, y eso es suficiente para impulsar la adopción de una nueva política nacional. Los finlandeses lograron una amplia unanimidad sobre resistir a la gigantesca Unión Soviética después del ataque soviético a Finlandia el 30 de noviembre de 1939. En la década de 1950, las seis principales democracias de Europa Occidental llegaron a un acuerdo para dar los primeros pasos que conducirían a la fundación de la Unión Europea, y evitar así una Tercera Guerra Mundial después de los horrores de la Segunda Guerra sin esperar a que la Tercera Guerra Mundial realmente sucediera. Y en las elecciones chilenas que sacaron del poder a Pinochet, el 55% de acuerdo fue suficiente para constituir un consenso.

¿Cómo se puede saber que un país está a punto de enfrentar una crisis seria? Le pregunto porque en Chile el estallido social de 2019, casi nadie lo vio venir...

En cuanto a predecir que un país está a punto de enfrentar una crisis severa, cuando vivía en Chile en 1967, ya había una ruptura creciente de los acuerdos políticos . En retrospectiva, ahora comprendemos que es una señal de advertencia de un posible gran problema, como está sucediendo ahora en Estados Unidos y en Reino Unido.

¿Cuál es el papel del liderazgo en una crisis? ¿Es el “gran líder” una idea obsoleta para resolver este tipo de problema?

A veces, un líder no juega ningún papel: el levantamiento de 1999 que derrocó al dictador Suharto de Indonesia no tenía un líder reconocido. En otros casos, un líder juega un papel decisivo, como lo hizo Winston Churchill en Gran Bretaña en mayo de 1940, o Lee Kuan Yew como líder fundador de Singapur. No se puede generalizar sobre el papel de los líderes: el cambio puede venir de arriba hacia abajo o de abajo hacia arriba.

La crisis y el conflicto son una constante, pero ¿son necesarios para evolucionar?

No siempre: vuelvo a mencionar el movimiento hacia la unificación de Europa en la Unión Europea, que comenzó con la decisión de los europeos de no esperar a la crisis de una Tercera Guerra Mundial. Pero no hay duda de que, la mayoría de los seres humanos, estamos más motivados para actuar por una crisis que por la sobria contemplación de los problemas en desarrollo antes de que haya una crisis. Como escribió una vez el autor británico Samuel Johnson: “Créame, señor, el pensamiento de un hombre se concentra maravillosamente si sabe que está programado que será ahorcado en dos semanas”.

Los cambios selectivos, es decir, definir los límites de lo que se cambiará para superar una crisis, son clave, escribe usted. ¿Cómo se puede hacer este proceso con diferentes puntos de vista, algunos de ellos contradictorios? ¿Y qué pasa cuando algunos líderes hablan de cambiarlo todo?

Los líderes que hablan de cambiarlo todo son casi siempre líderes tontos que cometen un gran error: cada país tiene algunas fortalezas y algunas instituciones que están funcionando bien, que NO DEBEN cambiarse. En cuanto a puntos de vista diferentes y contradictorios, la esencia de la democracia es decidir políticas a pesar de puntos de vista diferentes y contradictorios, y a pesar de la inevitable falta de unanimidad. Como no- chileno, considero que ustedes los chilenos hicieron increíblemente bien en adoptar y perseguir nuevas políticas al final de la dictadura de Pinochet, aunque difícilmente tuvieron unanimidad, sólo una mayoría de 55% a 44% a favor del cambio. Eso fue suficiente para permitirles a los chilenos adoptar o tolerar cambios importantes.

Usted define 12 elementos que son claves (para superar crisis): aprender de otros países es uno, aceptación de la responsabilidad, fuerte identidad nacional, entre otros. Además, reconocer los fracasos nacionales. ¿Cómo se puede hacer todo esto sin culpas ni deseos de venganza?

Nuevamente los admiro a ustedes los chilenos quizás más de lo que se admiran a ustedes mismos. Al final de la dictadura de Pinochet, las razones para culpar y el deseo de venganza eran obvias. Sin embargo, no se intentó realizar asesinatos en masa de los partidarios de Pinochet, mientras que el general Franco de España, al final de la Guerra Civil española en 1939, llevó a cabo asesinatos en masa de sus oponentes derrotados. Le doy crédito a su Presidente Aylwin, quien adoptó el lema “Un Chile para todos los chilenos”, que era un eufemismo para un Chile en el que los sobrevivientes de la tortura podían vivir en el mismo país que sus torturadores, sin buscar una venganza violenta, porque ustedes los chilenos reconocieron que no tenían otra opción, dado que a Pinochet se le había dado una votación del 55% al 44%, no con una votación del 95% al 5%.

Uno de sus capítulos trata sobre la mayor crisis que ha tenido Chile: golpe de Estado y dictadura. También escribe sobre cómo la oposición unida, en el plebiscito del 88, pudo dejar atrás sus diferencias y pasar a la transición, en una evolución pacífica. En Chile hoy hay críticas sobre esos años, y no somos inmunes a la polarización. ¿Qué piensa al respecto, especialmente cuando estamos a punto de redactar una nueva Constitución?

Mis pensamientos sobre Chile hoy son: ustedes hicieron la transición de 1988 a 1989 con enormes probabilidades en contra; pocos otros países podrían haber tenido éxito. Por eso soy optimista de que ahora también tendrán éxito en hacer una nueva transición.

Aylwin-y-Pinochet

Como dice, no victimizarse y no culpar a los demás es muy relevante para salir adelante en momentos como este. ¿Qué funciona para crear un diálogo nacional libre de esos problemas?

¿Qué funciona? Un diálogo nacional que reconozca que no se puede cambiar el pasado, y que diferentes personas persistirán en tener diferentes puntos de vista, y que es imposible encontrar una solución que haga felices a todos -excepto matar o esperar las muertes de todos los que tienen opiniones minoritarias. Pero es mejor encontrar una solución que deje a TODOS un tanto infelices, porque nadie consiguió todo lo que quería. Es decir, ¡ACUERDOS!

El Covid como maestro

¿Cuáles son los riesgos que enfrentan los países en períodos como este?

Todos los posibles riesgos que los países han enfrentado alguna vez, se están enfrentando ahora, en un período como el actual.

¿Qué se puede aprender de la crisis Covid? ¿Ve lecciones aquí que pueden ayudar a avanzar? ¿Ve a los líderes aprendiendo?

La principal lección que se debe aprender del Covid: los problemas globales requieren soluciones globales. Ningún país estará a salvo contra Covid, hasta que todos los países estén a salvo, porque un país que eliminó el Covid dentro de sus fronteras pero no en el resto del mundo simplemente será reinfectado. Lo que es cierto para el Covid también es cierto para el cambio climático y el agotamiento de los recursos: esos también son problemas globales que exigen soluciones de ese tipo.

FOTO: AP Photo/Andre Penner

El cambio climático ya es una gran crisis, ¿por qué los gobiernos no lo abordaron de la manera correcta?

Ya existe una enorme crisis medioambiental; sería mucho peor en 2050 si no lo resolvemos pronto. ¿Por qué los gobiernos no han abordado ya el cambio climático de la manera correcta? Porque el Covid mata a las personas en unas pocas semanas, por síntomas inequívocos, mientras que el cambio climático tarda más en matar a las personas, de formas indirectas y equívocas (como hambrunas, tsunamis, sequías, propagación de enfermedades tropicales y otras consecuencias indirectas del cambio climático).

¿Es optimista de que esto podría cambiar y por qué?

Sí, soy cautelosamente optimista de que los gobiernos pueden cambiar la forma en que lidian con el cambio climático, porque el Covid es un maestro muy convincente. Una vez que el mundo haya encontrado una solución global al problema global de Covid, soy cautelosamente optimista de que generalizaremos y también adoptaremos una solución global al problema global del cambio climático.

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